Vasectomía: controla tu fertilidad sin afectar tu vida sexual

La vasectomía es uno de los métodos de control de natalidad más efectivos y permanentes disponibles para los hombres. Aunque en la actualidad el tema sigue pareciendo intimidante y desconocido para algunas personas, es importante comprender que este procedimiento es una opción segura y sencilla para quienes desean evitar embarazos.

La vasectomía es una modalidad de control de natalidad que corta la provisión de espermatozoides al semen. La vasectomía tiene un riesgo bajo de inconvenientes; por lo que se lleva a cabo en un hospital, clínica o consultorio con el paciente completamente despierto y con anestesia local.

La vasectomía consiste en una intervención quirúrgica menor en la que se cortan o bloquean los conductos deferentes, que son los que transportan los espermatozoides desde los testículos hacia el semen. Al impedir que los espermatozoides lleguen al semen, el hombre se vuelve estéril, es decir, ya no podrá dejar embarazada a una pareja.

Sin embargo, contrario a lo que muchas personas creen, es importante mencionar que este procedimiento no afecta la capacidad para tener relaciones sexuales, el deseo sexual o el placer durante el acto.

La realidad es que la vasectomía no cambia en absoluto la producción de testosterona, ni afecta las erecciones, orgasmos o eyaculaciones. El único cambio que realmente provoca una vasectomía es que el semen ya no contendrá espermatozoides.

Desde un punto de vista práctico, esto significa que un hombre seguirá eyaculando como siempre, pero el semen ya no tendrá la capacidad de fecundar un óvulo. Esto representa para muchos hombres, una mayor relajación a la hora del sexo, ya que no tienen la preocupación de un embarazo no deseado.

¿Cómo se realiza una vasectomía?

Los espermatozoides se producen en los testículos. Estos salen al momento de tener una eyaculación, viajando por los dos conductos (conductos deferentes) y se mezclan con otros fluidos para formar el semen. Estos espermatozoides pueden producir un embarazo si entran por la vagina.

La vasectomía consiste en cortar cada uno de los ductos deferentes para que los espermatozoides no puedan salir, al quedar atrapados dentro del cuerpo, este mismo los absorbe. Este procedimiento se realiza muy rápido con una pequeña incisión en la parte superior del escroto. Se ligan los conductos deferentes y se cortan por separado. Y finalmente, la herida se cierra con puntos de sutura.

Existe también la llamada vasectomía sin bisturí, la cual conlleva el mismo procedimiento solo que, en lugar de realizar una incisión, el doctor realizará un agujero diminuto en la piel del escroto y cortará por ahí mismo los ductos deferentes.

Una vez realizada la vasectomía, es necesario esperar 3 meses para que tu semen deje de tener espermatozoides, por lo que será necesario realizar pruebas de espermatozoides en algún laboratorio para verificar que tu semen ya no arroje ningún esperma.

¿La vasectomía es reversible?

La vasectomía está pensada como un método anticonceptivo permanente, por lo que normalmente no se puede revertir. Sin embargo, en algunas ocasiones, es posible revertir una vasectomía, pero esto no garantiza una buena fertilidad.

Para poder revertir una vasectomía, se deben de analizar algunos factores como:

El tiempo que ha pasado desde que se realizó la vasectomía.
El tipo de vasectomía realizada
Los tipos de procedimientos de revisión que se realicen y las habilidades y facultades con las que cuente tu doctor de confianza.

Si estás pensando que con el tiempo se puede revertir, tal vez sea mejor esperar al procedimiento y optar por algunos otros métodos anticonceptivos en lo que se toma una decisión final.

¿Existe riesgo en la vasectomía?

No existe algún tipo de contraindicación al momento de realizar o posterior a la realización de la vasectomía. Sin embargo, existen algunos efectos secundarios inmediatamente después de la cirugía. Pueden incluir:

Sangrado o un coágulo dentro del escroto.
Sangre en el semen.
Moretones en el escroto.
Infecciones en el lugar de la operación.
Dolor o malestar.
Hinchazón.

Como se ve, la vasectomía es una excelente opción para aquellos que buscan un método anticonceptivo permanente y que no afecta la calidad de la vida sexual. Sin embargo, como cualquier decisión de salud, debe tomarse de manera informada y responsable, considerando tanto los beneficios como las implicaciones a largo plazo.

Finalmente, es importante destacar que la vasectomía no protege contra las infecciones de transmisión sexual (ITS). Es decir, el uso de preservativos sigue siendo esencial si se desea mantener relaciones sexuales seguras y evitar el contagio de enfermedades.

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