¿Te ha pasado que, luego de una discusión con tu pareja, puedes tener una relación sexual más cachonda?
Bueno, pues no eres la única persona a la que le pasa este efecto del sexo de reconciliación. Aquí hablaremos sobre tres puntos que quizá aclaren tus dudas y generen mucha curiosidad. ¡Alerta de spoiler! No necesitas tener una bronca para disfrutar del placer de esa energía, sólo necesitas celebrar las diferencias que tú y tu pareja tienen y así reconocerse día con día con la misma curiosidad.
A continuación, tres puntos importantes sobre el sexo salvaje de reconciliación:
1) Tu pareja es diferente a ti por el simple hecho de ser otra persona… Y eso es excitante.
El motivo de las discusiones en una pareja puede ser variado, hay parejas que son más intensas que otras. Sabemos que el conflicto es inevitable en cualquier relación humana, el éxito de la pareja radica en saber solucionar o negociar dichos puntos de vista. Estas discrepancias nos hacen ver lo distinto que es nuestra pareja, lo cual puede llegar a atraernos de nuevo. De acuerdo con Esther Perel, nuestra naturaleza es curiosa y la novedad nos llama; en una discusión con la pareja, reconocemos lo diferente que es y nos vuelve a gusta como la primera vez.
2) El efecto de Luna de Miel puede perpetuar la violencia en la relación de pareja.
¿Qué es esto del efecto Luna de Miel? Es esa emoción que sientes al tener sexo después de una disputa y la conexión y tranquilidad que vuelves a sentir con tu pareja al finalizar la relación sexual mientras terminan abrazados. Esto suele sonar bastante cómodo e incluso deseable, pero es una trampa… el sexo no resuelve los problemas. El placer es genial y es especial cuando se comparte, pero lo único que soluciona los conflictos es la comunicación, los acuerdos y el compromiso de continuar de la mejor manera posible.
3) La energía del diálogo en una discusión funciona como catalizador de nuestra energía sexual y a veces, en la emoción, se nos olvida usar condón.
¡De nuevo! No uses el sexo para arreglar un problema y no olvides usar condón. En ocasiones, las discusiones o peleas en serio son un síntoma de que algo va mal en la relación y, en el calor del sexo salvaje, se te puede olvidar usar condón o un método anticonceptivo y ¿sabes qué es lo peor? Que terminas con una persona a la que ya no quieres, con quien ya no puedes dialogar y ahora le ves para compartir el tiempo del menor. No te hagas eso, mejor usa condón y disfruta de la energía de querer comerte al otro.
